Un sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) es crucial para una operación fiable de un centro de datos y de cualquier equipo de TI. Un SAI proporciona alimentación limpia de backup para los equipos conectados, protegiendo esos dispositivos y asegurando la operatividad ante cortes de alimentación, sobretensiones u otras fluctuaciones de suministro eléctrico.
Un SAI es básicamente como una póliza de seguro contra los altísimos costes derivados de los tiempos de inactividad no planificados. Dado que los centros de datos son más críticos que nunca a la hora de generar ingresos y prestar los servicios que necesita el comercio electrónico, los tiempos de inactividad no son una opción para la mayoría de las empresas.
Los sistemas SAI protegen la actividad de las empresas contra apagones inesperados. Pero los sistemas son tan fiables como las baterías del SAI que los soportan. Las baterías pueden ser el componente más sencillo de un SAI, pero probablemente sean el más importante. De hecho, en un informe del Instituto Ponemon de 2021, Data Center Downtime at the Core and the Edge: A Survey of Frequency, Duration and Attitudes, los fallos de batería de los SAI fueron una de las principales causas de los tiempos de inactividad. Incluso una sola celda defectuosa en una cadena de baterías puede poner en peligro todo el sistema de suministro de reserva de una instalación durante un corte de energía, dejando a una organización sin la protección esencial que necesita.
Dado que las baterías de los SAI son tan imprescindibles para la continuidad de la actividad empresarial como vulnerables a problemas y fallos, es fundamental elegir las baterías de los SAI de forma inteligente, comprender sus limitaciones e implementar un programa de mantenimiento de baterías adecuado. Al hacerlo, tendrás más confianza en el sistema responsable de mantener tu negocio en funcionamiento, sin importar lo que haga.
¿Cuáles son los principales tipos de baterías de un SAI?
Existen tres tipos principales de baterías de un SAI, cada una con un precio, una vida útil y unos requisitos de mantenimiento diferentes. Equilibrar estos tres factores ayuda a los administradores de centros de datos a determinar el mejor tipo de batería para sus requisitos empresariales específicos.
-
Baterías de plomo-ácido. Las baterías de plomo ácido son una opción probada, fiable y rentable para esos sistemas. Ofrecen una gran capacidad de almacenamiento a un coste razonable. Sin embargo, son más pesadas, normalmente requieren más mantenimiento y tienen una vida útil más corta que otros tipos más recientes de tecnologías de baterías.
Baterías de plomo-ácido (VRLA) reguladas por válvula. Las baterías tipo VRLA también se conocen como baterías selladas. Por lo general, están selladas con plástico de polipropileno para evitar fugas de ácido de la batería. También contienen una válvula que libera la presión de gas dentro de la batería cuando sube demasiado. Las baterías VRLA para sistemas SAI suelen tener una vida útil de unos cinco años. Pueden ser intercambiables en caliente y sustituibles por el usuario, lo que ayuda a simplificar el mantenimiento.
-
Baterías de ion-litio. Las baterías de ion-litio para SAI representan una de las tecnologías de baterías más recientes y ofrecen varias ventajas. El precio inicial es más alto, pero el coste total de propiedad suele ser menor porque las baterías de ion-litio tienen al menos el doble de vida útil que las baterías VRLA, pueden funcionar a temperaturas más altas, requieren menos refrigeración y tienen menos requisitos de mantenimiento. Las baterías de ion-litio también son más pequeñas, más ligeras y tienen tiempos de recarga más rápidos, proporcionando mayor tiempo de autonomía. Estas baterías se suministran con capacidades de monitorización incorporadas para controlar su estado, lo que las convierte en una opción altamente fiable para evitar los tiempos de inactividad.
¿Cuánto duran las baterías de un SAI?
Como se ha comentado anteriormente, cada tipo de batería de SAI ofrece diferentes periodos de vida útil promedio. Sin embargo, es importante comprender la diferencia entre la vida útil del diseño y la vida útil de servicio de la batería, y eso es aplicable a todo tipo de baterías. Confundir estos dos conceptos puede conducir a errores muy costosos.
La vida útil de diseño de la batería la determina el fabricante y tiene en cuenta el diseño de las celdas y el envejecimiento de la batería en condiciones controladas en el laboratorio del fabricante. Sin embargo, estas condiciones de fábrica rara vez se reproducen en el mundo real.
Por esa razón, la vida útil de servicio de la batería es el parámetro más importante a tener en cuenta. La vida útil de servicio de la batería contempla de qué forma la aplicación, la instalación, las condiciones de funcionamiento reales y las prácticas de mantenimiento afectan a su envejecimiento. Entre los factores específicos que afectan a la vida útil real de una batería de un SAI están:
- Humedad y temperatura del entorno del SAI
- Frecuencia de encendido/apagado del SAI
- Tipo de batería y entorno de almacenamiento
- Alcance y frecuencia del mantenimiento
En realidad, al dar soporte al SAI, las baterías suelen fallar mucho antes de la vida útil diseñada por el fabricante. Por ejemplo, para las baterías VRLA de 10 años, la capacidad tiende a disminuir su capacidad alrededor del tercer o quinto año. Entre cinco y siete años, es probable que esté al final o cerca del final de su vida útil. Las baterías de ion-litio suelen durar entre dos y tres veces más.
¿Qué protección ofrece la garantía de una batería de un SAI?
La mayoría de las baterías para SAI disfrutan de una garantía que puede extenderse entre 24 y 72 meses. Las garantías de las baterías están diseñadas para garantizar y cubrir la calidad de fabricación y su rendimiento. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la garantía no cubre la pérdida normal de rendimiento debido a su antigüedad o a su uso.
Además, muchas garantías solo son válidas si la puesta en marcha se realiza de forma profesional y con un mantenimiento anual regular. La batería debe contar con registros de servicio para corroborar cualquier reclamación de garantía. En otras palabras, no puedes confiar solo en la garantía para proteger tus baterías y tu negocio.
Los proveedores de servicios de baterías como Vertiv pueden gestionar la puesta en marcha y el mantenimiento continuo que necesitan, y a menudo pueden gestionar además todos los aspectos de las reclamaciones de garantía, incluida la medición y envío de la resistencia interna y otros datos importantes al fabricante de la batería.
¿Cuál es la mejor forma de mantenimiento de las baterías de un SAI?
Con las crecientes exigencias de los administradores de centros de datos y el personal de TI interno, no es raro que se posponga o se pase por alto la sustitución o el mantenimiento de las baterías de los SAI. Pero el mantenimiento de las baterías de un SAI no es algo opcional. Es necesario para cumplir las condiciones de garantía y los requisitos normativos de organizaciones como el Institute for Electrical and Electronics Engineers (IEEE).
Requisitos mínimos de mantenimiento de la batería
Como desarrollador líder de estándares del sector en una amplia gama de tecnologías, el IEEE ostenta los estándares más conocidos relativos a las prácticas de mantenimiento de baterías de un SAI. De hecho, los fabricantes de baterías a menudo citan estos estándares y requieren su cumplimiento para ofrecer una garantía del producto válida.
Los estándares IEEE proporcionan recomendaciones para el mantenimiento, las pruebas y la sustitución de las baterías en aplicaciones fijas. Abordan la frecuencia y el tipo de mediciones que deben realizarse para validar el estado de los diferentes tipos de baterías de SAI:
Cuatro enfoques para mantener el buen estado de las baterías de SAI
Si bien los estándares IEEE son un excelente punto de partida, muchas organizaciones que quieren garantizar un riesgo de tiempo de inactividad cero inesperado van más allá. Un sólido programa de mantenimiento ayuda a optimizar el rendimiento de la batería y garantiza el tiempo de autonomía de la batería que se necesita y cuando se necesita. Además, es la clave para facilitar la sustitución de las baterías del SAI a tiempo, antes de que fallen y causen potencialmente tiempos de inactividad.
Dicho esto, las empresas cuentan con presupuestos y otras consideraciones a tener en cuenta en sus decisiones de mantenimiento. Basándose en estas variables, como el nivel general de tolerancia al riesgo de la organización, la mayoría de los operadores de centros de datos tienden a adoptar uno de los cuatro enfoques siguientes en el mantenimiento de baterías de un SAI:
- Enfoque reactivo: también conocido como Break/Fix, este es el método más arriesgado, ya que solo se toman medidas correctivas tras producirse una interrupción. Este enfoque solo es viable cuando las consecuencias del tiempo de inactividad no se consideran críticas para la actividad de la empresa o cuando el presupuesto es muy limitado.
- Enfoque basado en el tiempo: implica visitas periódicas de mantenimiento preventivo para inspeccionar visualmente y prestar servicio al sistema SAI (incluidas las baterías) y a menudo es adecuado para cumplir con los requisitos normativos. Aunque un enfoque basado en el tiempo ofrece beneficios significativos sobre un enfoque reactivo, sigue siendo arriesgado. No tiene en cuenta factores externos que pueden provocar una vida útil del SAI y de la batería significativamente más corta de lo esperado.
- Enfoque proactivo: en general, cuanto más sólido sea el enfoque al abordar el estado de salud de la batería, mejor. Un programa de mantenimiento integral que incluya evaluaciones de componentes y un plan de sustitución de baterías es una de las medidas más rentables que puedes tomar para garantizar la fiabilidad del sistema de alimentación de emergencia y evitar costosos tiempos de inactividad.
¿En qué consiste el proceso de sustitución, reciclaje y eliminación de las baterías del SAI?
Lo ideal es sustituir las baterías del SAI antes de que fallen, y el enfoque de mantenimiento de la batería elegido ayudará a determinar el momento adecuado. Aunque las baterías de ion-litio suelen tener la misma vida útil que un sistema SAI, en el caso de las baterías VRLA, la mayoría de los expertos del sector recomiendan una sustitución conservadora cuando empiece a producirse un deterioro crítico y en torno a los cinco-siete años desde el inicio del servicio.
Como la sustitución de baterías es una inversión importante, se recomienda trabajar con un experto en baterías de SAI para garantizar que el trabajo se realice de forma correcta y segura. El partner de servicio que se elija debería ser capaz de prestar un servicio integral, desde el soporte técnico y la instalación hasta el servicio y las pruebas de verificación de la batería. Un partner también puede ayudar a garantizar la eliminación y el reciclaje adecuados de las baterías usadas de acuerdo con todas las normativas medioambientales aplicables.
Servicios de batería que ofrece Vertiv
Como líder mundial en servicios de baterías, incluido el mantenimiento, las pruebas y la sustitución, Vertiv presta servicio a 10 000 sistemas SAI, sustituye a 9000 cadenas de baterías y presta servicio a 2 millones de contenedores de baterías cada año en ubicaciones de todo el mundo. Los servicios incluyen:
Power Assurance Package: al combinar los mejores sistemas SAI del mercado con un plan de protección de cinco años, esta oferta de servicios es ideal para proteger pequeños centros de TI.
Battery Service: la suscripción a un programa de mantenimiento preventivo de la batería puede mejorar significativamente la disponibilidad del sistema mediante la detección de posibles problemas y la respuesta rápida a defectos y degradación de la batería.
Contratos de garantía y servicio: Vertiv ofrece un amplio conjunto de planes de servicio diseñados para optimizar la protección de la garantía y garantizar continuamente el buen estado de salud de todas tus cadenas de baterías